Qué hacemos
Procuramos que nuestra escuela esté compuesta por grupos heterogéneos, en los cuales las diferencias permitan el ejercicio de la tolerancia y la solidaridad. Justamente, porque sabemos que el mundo puede ser un ambiente hostil, en el cual no se respeta ni se toleran las diferencias, buscamos intencionalmente que nuestra escuela sea distinta a esa realidad.
Por ello es inclusiva: no por el hecho de incluir alumnos con alguna discapacidad, sino porque todos los alumnos, con discapacidad o sin ella, ocupan un lugar irremplazable y único dentro de la comunidad.
Es nuestra política realizar asambleas en el aula para tratar temas concernientes a la formación de nuestros estudiantes, y asambleas generales que integren a diferentes edades, en las cuales se discuten temas transversales a los distintos grados, y donde se toma en cuenta la opinión de todos. Es una actividad vital para mantener al día el deseo del alumnado de participar en las decisiones que se toman.
Nuestra escuela cree en la importancia del contacto directo entre los alumnos y su entorno. Es por ello que incluimos siempre en nuestro currículo campamentos, viajes y otras experiencias, a la vez que promovemos la visita de personas e instituciones que nos enriquecen con sus conocimientos o propuestas de vida. Es claro para nosotros que cada una de estas actividades acercan más a los alumnos entre sí, y fortalecen los vínculos entre ellos y los adultos a la vez que los acercan a su país; también les muestran un plano de la convivencia que se complementa con lo que se imparte dentro del aula.
Con respecto a la metodología de enseñanza, tenemos la convicción de que no existe un único camino para lograr nuestros fines. Por ello, hacemos uso de distintos métodos pedagógicos, pero no promovemos ninguno en particular. Conocemos la realidad del aula, y por eso, sabemos que lo que funciona para unos, no funciona necesariamente para los demás.