“Manifiesto sobre la desigualdad de los hombres (Gansos de mundo: uníos)”, en Donde habita la moral

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Autor: Constantino Carvallo / Ilustración: Gianell Ordóñez
2011

Acabar con los falsos OIimpos, y sin embargo, conservar la capacidad de sentir lo que sufre el marginal, el excluido. Comprender entonces que la clasificación en nuestro país no es ya en términos de quién es ganso y quién bacán sino en quién tiene las calorías necesarias para sobrevivir y quién se muere cada día. Cultivar la piedad, la virtud que nos permite sentir con el otro, ser auténticamente solidario. Tal vez, aunque solo sea en este sitio, en un aula de 35 alumnos, en una escuela de 400, responder a la pregunta de Julio César, la más simple de su vida: “¿Por qué, oh dioses, no es posible que seamos todos amigos? ¿Por qué este empeño de luchar inútilmente unos contra otros?”. Deponer los celos, la envidia, la desigualdad. Colocar por sobre todo la amistad, el respeto, la ayuda mutua. Trabajar así, todos juntos, para acercar el día en que declaremos la paz perpetua.