¿Por qué viajamos en Los Reyes Rojos?

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Autor: Colegio "Los Reyes Rojos"
2015

Los grupos se construyen al formar una historia común. Esto se logra a través de momentos compartidos, únicos, que inevitablemente quedan presentes en el recuerdo, y en los que se desarrolla una sensación de pertenencia a algo que nos trasciende como individuos. Hemos aprendido a lo largo de los años que los viajes son oportunidades invalorables para alcanzar este objetivo.

De hecho, en la convivencia diaria de la escuela, las relaciones entre maestros y alumnos están determinadas principalmente por la exigencia académica. Los viajes son una ocasión para otro tipo de convivencia, que rompe esos típicos modos de vincularse. Allí, las relaciones permiten que conozcamos nuevas dimensiones de los alumnos, y que ellos hagan lo mismos con sus maestros.

En este sentido, esta experiencia busca que gocemos juntos de lo que sea: del viaje en bus, del campo, del paisaje distinto, de las noches en las carpas o en el hotel, de los juegos, del mar, de los cuentos improvisados, de los chistes y las anécdotas.

El viaje es una experiencia que promueve el desarrollo de la autonomía. Aunque se mantienen la autoridad y los horarios, estos se diferencian de los que habitualmente imponen la familia y la escuela. De esta manera, los chicos tienen la oportunidad de poner en práctica recursos personales que no son siempre necesarios en la rutina cotidiana: se responsabilizan por sus cosas, y se cuidan a sí mismos.

El viaje también les exige enfrentar la angustia de separación, algo que será indispensable en muchas situaciones durante su vida. Fomenta la confianza en ellos, en sus pares y en los adultos. Se dan cuenta de que es posible estar tan amorosamente cuidados por sus maestros como por otros adultos cercanos.

Los viajes desarrollan también el espíritu aventurero y la tolerancia a cierto nivel de incomodidad.  La sensación de estar viviendo una aventura y de estar con los amigos a tiempo completo hace obviar algunas molestias: demuestra que no es tan importante la comodidad de la cama, del cuarto, de las personas que atienden todos los pedidos al segundo.

Finalmente, estamos convencidos de que viajar fomenta el conocimiento, el orgullo, y la consecuente sensación de pertenencia a nuestro bello país. Por esto viajamos por tierra, para ver más, y por esto, también, siempre buscamos un nivel de intercambio con la población local. Viajar hace posible conocer y disfrutar de su inmensa diversidad, y aprender de su historia.